Argentina es una república ubicada en América del Sur, cuya capital es la ciudad de Buenos Aires. Se trata del país hispanohablante más extenso, con una territorio de 2.780.400 kilómetros cuadrados. El gobierno argentino sigue los principios de la democracia representativa y el federalismo.
Democracia Representativa
La democracia representativa es una manera de organizar la sociedad que tiene como característica fundamental el hecho de que es la ciudadanía la que detenta el poder, ejerciéndolo a través del voto, con la elección de funcionarios que representan a distintos grupos de esa sociedad.
En sus inicios, la democracia se ejercía directamente por los ciudadanos, quienes votaban en asambleas. Las sociedades modernas son extraordinariamente complejas, y por ello actualmente se hace necesaria la elección de representantes, los cuales conforman congresos o asambleas para redactar leyes y ejercer control sobre otros poderes públicos.
Federalismo
El federalismo es un sistema en el que las entidades subnacionales que constituyen un país retienen ciertas funciones de gobierno, a la vez que delegan otras competencias en un gobierno central. Generalmente, las competencias que los estados o provincias delegan en el gobierno central son la defensa del territorio, las relaciones internacionales y la construcción y mantenimiento de las infraestructuras, pero esto varía de acuerdo a cada país.
El sistema político argentino consta de dos estructuras gubernamentales que funcionan en paralelo: el gobierno central o federal; y los 23 gobiernos provinciales, a los que cabe sumar el gobierno de la ciudad autónoma de Buenos Aires como una entidad especial y diferente.
Argentina nació tras la guerra de independencia, a partir de la unión de diversas provincias que conformaban el Virreinato del Río de la Plata. Por tanto, las provincias son preexistentes al gobierno central, y éste solamente ejerce los poderes que las provincias le han transferido expresamente.
A nivel central existen tres ramas del gobierno: el poder legislativo, el poder ejecutivo y el poder judicial.